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Los vecinos de Los Alcázares han aportado ideas para el futuro Plan General de Ordenación Urbana del municipio

Potenciar el patrimonio natural, regenerar el casco histórico, potenciar el uso de la bicicleta y adaptar la ciudad a la población envejecida son algunos de los principales retos.

Este último taller participativo de la de la Agenda Urbana 2030, celebrado el pasado 27 de julio, ha querido que los participantes aportaran ideas para el planeamiento municipal. Esta dinámica se describe como una aproximación participada al proceso de elaboración del documento de Plan General, que el Ayuntamiento quiere formular para actualizar las normas subsidiarias del año 1986 vigentes hoy por hoy.

Un Plan General es un instrumento de ordenación del territorio que comporta una estrategia territorial global más allá del campo específico del urbanismo, atendiendo también al sistema económico, social, cultural y ambiental del municipio. Es, por tanto, un documento alineado con los retos y objetivos surgidos del diagnóstico del territorio sucedido en 2021 y recogidos por la Agenda Urbana de Los Alcázares 2030.

De esta manera, el taller comenzó haciendo una reflexión previa por grupos sobre aquellos objetivos estratégicos de la nueva Agenda Urbana que tienen que ver con el planeamiento y las actuaciones que se recogen en ella para hacerles frente. Dichos retos son: potenciar el patrimonio natural y regeneración del entorno de Mar Menor; regenerar el casco histórico e impulsar una nueva estrategia urbana; actuar frente a la alta vulnerabilidad frente al cambio climático; potenciar el uso de la bicicleta y los desplazamientos a pie; integrar a la población inmigrante y adaptar la ciudad a la población envejecida e invertir en el empleo estacional; por último, rehabilitar el parque inmobiliario y activar la vivienda pública. Los asistentes, a su vez, podían proponer más actuaciones que hicieran frente a estos retos, además de las ya identificadas en la Agenda. La siguiente parte de la dinámica consistió en trasladar esas actuaciones a un plano a escala del municipio utilizando un código de colores para representar una zonificación básica como lo haría un Plan General. Así pues, el color azul hacía referencia al suelo urbanizable, el amarillo al suelo no urbanizable, el naranja al suelo protegido, el verde para las zonas vegetales, el rosa para las infraestructuras y el morado para los equipamientos o construcciones municipales.

El resultado de este taller fue una propuesta ciudadana de ordenación del municipio de Los Alcázares que pudiera servir de base para elaborar un planeamiento actualizado de los Alcázares.